Maggie está recuperándose de un fracaso sentimental. Cierto día, una amiga la convence para ir a un popular bar de solteros; allí conoce al atractivo Roy Calvin. Pronto inician un absorbente y apasionado idilio… y las cosas comienzan a ir mal, ya que los celos y afán de posesión de Roy están convirtiendo a Maggie en una auténtica prisionera. Paralelamente, Sam, el exnovio de Maggie, desea volver con ella. Lleno de rabia y celos, Roy apuñala auno de los compañeros de trabajo de Maggie y logra que todo apunte hacia ella, convirtiéndose en la principal sospechosa del crimen.