Después de una accidentada persecución por las carreteras y las montañas se captura a un peligroso malhechor. Como está oscureciendo, un inspector de policía, un gendarme y el malhechor son obligados a pasar la noche en un refugio de la montaña. El ocupante del refugio y un pintor se enzarzan en una discusión sobre el destino de cada uno y, para reforzar su teoría, el segundo cita un caso y lo explica. La historia del pintor se refiere al gerente de un hotel que, habiendo cometido una estafa, huye con el pasaporte de un financiero al cual se parece de una extraña forma y es arrestado... por un crimen cometido por el financiero.