El cuerpo de un adolescente que pertenecía a una banda callejera y que llevaba tiempo desaparecido, aparece con la tarjeta de visita del inspector Provenza en el bolsillo. En esta ocasión, un cura cuyo trabajo se centra en ayudar a jóvenes pandilleros será el centro de la investigación de Brenda. Por otro lado, el padre de Brenda conocerá que su hija y Fritz están viviendo juntos.