Hanzō se encuentra con Mifune y empieza la lucha entre dos antiguos enemigos, Hanzō recuerda como fue su muerte ante Pain y la batalla que tuvo hace mucho tiempo contra el samurai la cual venció y salvó la vida de Mifune en la pelea. Hanzō pierde y se da cuenta que aunque sea inmortal nunca cambiaría el mundo hacía la paz, suicidándose al estilo samurai con un Seppuku para luego ser sellado.