Durante la estancia en un planeta de sebáceos que hace siglos se separaron de los Pacificadores, los compañeros se ven involucrados en una trama de política y espionaje donde los miembros de la familia real intentan hacerse con el poder. Con ayuda de un Scarran, uno de los príncipes ha conseguido que ningún habitante de planeta sea compatible con la princesa para generar hijos, así que él heredaría el trono. Sin embargo, Crichton resulta ser compatible y es empujado a comprometerse con ella. No desea hacerlo, pero Scorpius, en su persecución, ha llegado al planeta, y será entregado a él si no accede a la boda. Mientras, D’Argo y Chiana disfrutan de su relación y Aeryn no sabe cómo enfrentarse a sus sentimientos hacia Crichton, pero también rechaza sistemáticamente todos los intentos que hacen los lugareños por ligar con ella.