Un gran director de cine se ofrece a seguir a Gordo para ver un día en la vida de un niño normal. Sin embargo, Gordo comienza a decirle cosas groseras a la cámara, e incluso engaña a Lizzie y Miranda para que se cuenten sus secretos delante de la cámara durante el cual se revela que Lizzie estaba enamorada de Gordo en el 4º grado. Mientras tanto, Matt es culpado por todos los problemas creados por Melina y él admira sus cualidades como un alborotador.