Ahora que su hijo Mateo es una realidad diaria, las cosas se complican para Jane, tanto en lo familiar como en su proyecto personal de convertirse en escritora. Rafael y Michael se ven obligados a trabajar juntos para resolver el asunto del secuestro, mientras Jane todavía se debate entre sus sentimientos hacia uno y otro. Por su parte, Rogelio se enfrenta a ciertos fantasmas de su pasado que complican su relación con Xiomara, y Petra sigue empeñada en salirse con la suya y podría tomar una decisión que lo cambie todo, especialmente ahora que cuenta con otra inesperada muestra del esperma de Rafael.