A pesar de los éxitos obtenidos y de los golpes que los intocables de Elliot Ness han dado a la organización y los negocios ilícitos de Al Capone, Elliot Ness todavía no ha podido conseguir el objetivo principal, el objetivo por el que se creó su grupo que no es otro que la detención de Al Capone. Un confiado Capone no se imagina que su imperio criminal está en serio peligro cuando el IRS planta un agente encubierto en su organización.