Con el último año de presidencia del gabinete Bartlet, nuevos candidatos de los dos partidos dominantes surgen con intención de ocupar el despacho oval. Un prometedor congresista (Jimmy Smits) y un astuto senador republicano (Alan Alda) se encuentran entre los candidatos a la presidencia. Pero, más allá de dirigir una oficina, implica dirigir un país, un trabajo que, por el momento, recae sobre los hombros de Bartlet (Martin Sheen) y su, ahora, reestructurado equipo. Se trata de un trabajo exigente y complicado a cada minuto y, aún más, desde el momento en que el presidente de la nación deba enfrentarse a su propia lucha personal.