Los glóbulos rojos se encargan de la ardua tarea de llevar el dióxido de carbono a los pulmones, y después transportar oxígeno a las demás células. El glóbulo rojo AE3803 sigue perdiéndose en todo momento. Pero esta vez está decidida a completar la ruta del sistema circulatorio sin ayuda. Solo por si acaso, el glóbulo blanco U1146 la vigila muy preocupado...