Los psiquiatras se dividen por el caso de Mariano Valdés, depresivo y con ataques de pánico a quien se acusa de parricidio. León descubrirá que Mariano es inocente y que el asesino de su padre es en verdad el hermano. Con todo, por pedido de Mariano, guardará silencio y secreto profesional. En tanto, Charo es invadida en su casa y puesta en riesgo por Lola. Logra salvar la situación por poco pero, afectada entre otras cosas por esto, decide dejar su medicación. Lucía lucha con la aplastante imagen de un padre psiquiatra altamente prestigioso.