El 31 de julio de 1997, el vuelo 14 de FedEx Express rebotó, se volteó a la derecha y se estrelló en el aeropuerto Internacional de Newark. Las 5 personas a bordo sobrevivieron. El 23 de marzo de 2009, el vuelo 80 del mismo operador se estrelló mientras aterrizaba en el aeropuerto Internacional de Narita, Japón, en circunstancias similares al vuelo 14, matando a ambos pilotos. Ambos accidentes se debieron al error de los pilotos. El viento y un defecto de diseño del MD-11 agravaron la situación en el caso del vuelo 80.