Luego de ver a Kagehisa, Rin se siente desfallecer. Mientras sigue perdida en sus pensamientos acerca de sus circunstancias, a Rin y su guardia Manji se les acerca un monje budista. El monje es Eiku Shizuma, del Ittou-ryu. Él pelea con Manji pero es cortado rápidamente. Sin embargo, pese al golpe letal, Shizuma vuelve a levantarse, con su herida sanándose por completo. Shizuma posee un cuerpo inmortal, igual que Manji.