Jackson Bellerose, un investigador policial de Martinica, se traslada a Nouméa, Nueva Caledonia, después de trabajar durante algún tiempo en la Francia metropolitana. Su personalidad rígida choca de inmediato con las relajadas actitudes tropicales de sus nuevos colegas, en particular Gaspard Watson, un hombre de mediana edad que atraviesa un complicado divorcio. Su otra colega, Clarissa Huarau, capitana de policía de la isla Reunión, es más comprensiva, pero tiene sus propios problemas con su rebelde hija adolescente. Jackson tiene problemas considerables para adaptarse a la forma de vida de Nueva Caledonia y ciertos aspectos de la cultura melanesia. A pesar de sus diferencias, el equipo resuelve una serie de casos, aprendiendo gradualmente a apreciarse mutuamente y ayudándose en asuntos personales.