La isla ha sido el escenario de una batalla de egos. Por un lado, el del nuevo Adán, un joven encantado de haberse conocido que buscaba a una chica rica (o con padres ricos) que le mantuviera. Por otro, el de Sara, una Eva de familia adinerada que ha tenido que soportar las burlas de su compañero de isla por parecerle “demasiado fea”. Y por último y definitivo, el de la poderosa Daniela, una madrileña con orígenes de Brasil que ha llegado al paraíso para darle una lección a ese joven tan altivo y lleno de prejuicios.